miércoles, 16 de octubre de 2013

Miércoles 16 de Octubre del 2013 Primera lectura Reflexión de la Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos (2,1-11):


Gálatas 6:7" No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará." Pablo nos pide que no seamos Jueces de nuestros hermanos, sobre todo porque nosotros mismos estamos llenos de debilidades. Juan 8, 7. " Como ellos insistían en preguntarle, se enderezó y les dijo: Aquel que este libre de pecado que tire la primera piedra." Cada vez que emitimos un Juicio contra nuestros semejantes, estamos pecando!!! Mateo 7, 1-2. " No juzguen a los demás y no serán juzgados, y la misma medida que ustedes usen para los demás, será usada para ustedes." Dios todopoderoso es el justo Juez a quien no le son ocultas las intenciones del corazón del hombre, por ello se nos dice que el día del juicio, ni siquiera los impíos tendrán la intensión de apelar porque no podrán presentar excusa o testimonio comprado que los libere de toda culpa. Ese día no solo serán expuestos los pecados del hombre sino las motivaciones del corazón que propiciaron que se cometieran las faltas. Por eso el Señor nos pide que expiemos nuestras faltas, perdonando a todo el que nos haga algún daño. Mateo 6, 12. "Y perdona nuestras deudas, como también perdonamos a nuestros deudores." La posibilidad de obtener misericordia se alcanza dándola nosotros también. Las palabras tienen poder para llevar a cumplimiento todo aquello que decretamos y si las personas no son merecedoras de lo que decimos de ellas, eso que lanzamos en su contra, se convierte en un saldo a favor nuestro. Hermanos, generalmente cuando Juzgamos lo hacemos motivados por una rebelión espiritual satánica, ya que el primero que quiso establecer juicio contra la creación de Dios fue el mismo lucifer!!! Nosotros estamos limitados en el conocer el corazón de nuestro prójimo, el tratarlos con misericordia nos traerá de Dios padre grandes bendiciones. Si JESUCRISTO hubiese juzgado por quien valía y por quien no la pena morir, el máximo sacrificio del hijo de Dios en la cruz jamas hubiese acontecido. Hermanos míos, si el todopoderoso actuando en Cristo Jesús perdona a todos, acaso somos nosotros mejores que Dios mismo para condicionar el perdonar!!!! De ninguna manera, pidamos al padre nos libre de todo egoísmo y maldad para que llenos de amor podamos imitarle sirviendo con caridad a nuestros hermanos. Gloria y alabanzas en la casa del excelso DIOS. Amen!!!!!!!!!!!!!!

 Angel Cortéz

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