La extensión del Reino o gobierno de Dios sobre la tierra, se lleva a cabo inicialmente, obteniendo una semilla que da acceso a un proceso de siembra que esperando su tiempo concluye felizmente con la cosecha de los frutos. Todos anhelamos soluciones sobrenaturales para los problemas que atravesamos o por la penosa situación de alguien a quien amamos. Sin embargo, pocos entienden que hay un proceso que desarrolla la fe que necesitamos para conquistar toda adversidad por el poder de la Gracia de Dios. El estar a la escucha de la palabra pareciera como tiempo perdido o algo que no tiene ninguna réditualidad, no obstante esa semilla es la que sembrada en la mente pasa al espíritu del hombre y comienza su fe a operar en la búsqueda de la intervención Divina. Así el grano de mostaza, siendo tan diminuto no representa el imponente arbusto que saldrá de él, de la misma forma no se explica como un poco de levadura hace fermentar una gran cantidad de masa. La vida, la obra y el amor de un solo hombre, produjo un trastorno tal a la humanidad que desde entonces los años cuentan, tomando como referencia quien es él!!!! Antes y después de Jesucristo es la referencia universal para establecer los tiempos en que ocurrieron diversos eventos en la historia del hombre!!!!!! Cuando estamos solos orando delante del Padre en nuestra habitación, no muy pocas veces nos parece que perdemos el tiempo, pero la fuerza incorruptible de la palabra de Dios, va transformándonos sin darnos cuenta y cuando comienzan a desbordarse los frutos, el asombro es genuino, sobre todo para los que creen conocer todas nuestras capacidades por estar cerca de nosotros. No se dan cuenta que todo fruto bueno proviene de la gracia de Dios actuando en nuestras vidas de dentro hacía fuera!!!! La semilla del Reino en ti hace posible que pases de ser una tierra fértil a ser el Edén de tus hermanos (tierra deseable). Por ello se nos manda a estar vigilantes de cada palabra que sale de nuestra boca porque del mismo modo que engendramos la bendición, lo hacemos con la maldición. Proverbios 18:21. "En la lengua hay poder de vida y muerte; quienes la aman comerán de su fruto". Nótese que cada palabra que sale de nuestra boca genera un resultado tangible de vuelta. Cuidemos que tipo de semillas estamos sembrando, cada vez que hacemos un comentario o una resolución, meditemos todo antes de hablar, no seamos descuidados y la bendición no se apartará de nosotros, expandiéndose el Reino en cada territorio que nos despleguemos. Hermanos, por muy pequeña que sea nuestra semilla, si hacemos lo correcto con ella, en su tiempo daremos una inmensa sombra donde todos vendrán a refugiarse por sentirse bendecidos a tu lado. Persevera en el Amor, tened la Fe de Dios!! SOLO HAY VICTORIAS EN JESUCRISTO. AMEN!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Angel Cortéz
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