lunes, 4 de noviembre de 2013

Lunes 04 de Noviembre del 2013 Primera lectura Reflexión de la Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos (11,29-36):

La salvación proviene de Dios, el hombre por sí solo no puede alcanzar gracia alguna del Padre a menos que sea ayudado por el Espíritu Santo, que comunica a nuestras conciencias, el mensaje propio de nuestro redentor Jesucristo. 1 Juan 2, 1-2. "Hijitos míos, os escribo estas cosas para que no pequéis. Y si alguno peca, Abogado  tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo. El mismo es la propiciación por nuestros pecados, y no sólo por los nuestros, sino también por los del mundo entero". Los Israelitas, al no creer en Jesucristo como el mesías (ungido con poder prometido), se han negado a recibir la invitación a la salvación ofrecida por Dios desde tiempos antiguos, por medio de su raza que son el pueblo escogido, para que este misterio de redención alcanzase a toda la humanidad. Génesis 22, 18. "Puesto que me has obedecido, todas las naciones del mundo serán bendecidas por medio de tu descendencia". Jesucristo nace en la carne como parte del pueblo Judío siendo copartícipe de la promesa hecha a los patriarcas de su raza, de donde sale la bendición que redime toda maldición desatada por el pecado. Empero los suyos rechazaron la invitación al banquete celestial abriendo Así la invitación a la redención al mundo pagano!!!! La biblia nos enseña a bendecir en todo tiempo a Israel, gracias a la alianza de ese pueblo con Dios, hoy tenemos la salvación. Al final ellos también saldrán de su rebeldía y serán salvos, porque Dios lo dispuso en su misericordia ilimitada. Juan 1, 11-13. "A los suyos vino, y los suyos no le recibieron. Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios; los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios¨. Nuestro padre desde el principio, dispuso todas las cosas, de tal manera que siempre los más despreciados por el hombre sean justamente los que manifiesten las glorias de su poder. ALELUYA, nuestro Dios es justo en gran manera, con ello confirma que somos salvados por pura gracia!!! Bendito sea por siempre el santísimo sacramento del altar. AMEN!!!!!!

Angel Cortéz

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